El Mejor hotel de Valladolid

En  Valladolid aún se respira un aire provinciano de notable acento colonial que está presente en sus elegantes casonas y edificios históricos. Alrededor de la Plaza Principal, una agradable explanada con amplias jardineras, se encuentran hoteles, restaurantes, el Palacio Municipal y la Parroquia de San Servacio.

En cada esquina se esconde un relato,  en cada fachada un color y en cada piedra miles de pasos…

Construida originalmente en 1545 y demolida en 1705 a raíz de su profanación en el llamado “Crimen de los Alcaldes” y reconstruida en 1706 cambiando su orientación para evitar que el altar quedara en la misma posición que el que fuera mancillado.  Muestra una arquitectura sobria de estilo franciscano, con dos torres de planta cuadrada y la caseta del único reloj público de la ciudad.

Al final de la Calzada de los Frailes se levanta esta joya colonial edificada en 1552; funcionó como monasterio Franciscano y fortaleza durante los ataques de los rebeldes mayas. En su interior se conservan frescos originales de finales del siglo XVI, catacumbas, criptas y capillas. La noria surtía el jardín de meditación y la huerta con las frescas aguas del cenote Ziis-Ha. Existe un museo donde se exhiben las armas arrojadas por los Españoles y recuperadas por el INAH del fondo del cenote.

La Santísima Vírgen de La Candelaria es la patrona de la ciudad y celebra su fiesta el 2 de febrero de cada año. El templo del siglo XVI fue construido de mampostería, con techo de bóveda y pisos de ladrillo, consta de una sola nave y tlene al frente un pequeño portal de tres arcos; al costado sur tiene un atrio pequeño y unas escaleras exteriores que conducen al camerín donde se expone la imagen en los días de fiesta.

Ubicado al sur de la plaza principal se encuentra el Barrio de San Juan, la iglesia se llama del Refugio de Pecadores y la patrona del Barrio es la Virgen del Refugio, el patrono de la iglesia es San Juan Bautista, la construcción data de 1780 y se compone al igual que los otros templos de la ciudad de atrio, templo, sacristía y anexos.

Su arquitectura hace pensar que fue construida en el siglo XVI y era para los indios, pues todos los oficios, excepto la misa eran en lengua maya. La construcción consta de atrio, templo y sacristía, el templo es de mampostería de un solo cuerpo, con muros lisos y la fachada rematada por espadaña con claros para las campanas. Los marcos de la puerta son de piedra tallada.

Su fachada está rematada por una espadaña simple con tres claros para las campanas, los marcos de las puertas están labrados en piedra con motivos vegetales. La construcción data de principios del siglo XVII.